Cuenta
una leyenda que el primer móvil que se inventó fue robado por un ingeniero que
lo modificó e hizo que el teléfono adquiriera el alma de un superhéroe.
Esta
historia empieza una mañana a las 10:00 A.M.
-¡¡¡Gabriel
levántate ya!!! -exclamó la madre.
-¡Ah!
¡Qué susto! -dijo Gabriel
-¡Venga!
¡Que llegas tarde al instituto!
-Voy… -respondió
Gabriel
Gabriel
era un niño muy aplicado aunque envidiaba un detalle que todos tenían menos él,
un móvil. En el instituto todos se pedían sus números de teléfono, se mandaban mensajes,
fotos… Resumiendo, lo que se hace con los móviles. Cuando le pedían su número
él decía que no se acordaba; mentía. Cada día decía a sus padres que le dieran
uno.
Después
de una semana…
-Gabriel,
tú madre y yo lo hemos pensado. -dijo el padre.
-Sí, te
hemos comprado un móvil. -añadió la madre.
-¡BIEN!
¡Gracias papá! ¡Gracias mamá! -exclamó Gabriel.
-El
móvil está en la mesa, cógelo. -dijo el padre.
-Vale. -respondió
Gabriel.
(Gabriel
cogió el móvil)
-Pero
este móvil… es antiguo…, bueno me vale, ¡Gracias! -dijo Gabriel.
-Es
antiguo, pero es especial. -le susurró el padre.
Gabriel
llevaba el móvil a todos los sitios, le
encantaba. Por fin chateaba, hablaba y mandaba fotos a sus amigos.
Pero un
día…
-¡Le
voy a enseñar mi nuevo móvil a mi tía! -exclamó Gabriel.
(Gabriel
pasando por el paso de cebra)
¡Un
coche estaba a punto de atropellarle! Pero, de repente…
Tirin Tirin
Tirin Tirin Tirin Tirin
-Anda
un nuevo mensaje. -pensó Gabriel
(Gabriel
se paró a leer el mensaje)
¡Y el
coche le pasó rozándo!
Gabriel
no se dio cuenta de que el móvil le había salvado, pero al cabo de unas semanas
se dio cuenta, cuando le iba a caer un bloque de piedra y el móvil sonó sin
haber llegado ningún mensaje ni llamada, y se paró de nuevo y esquivó el
bloque.
Cuando
Gabriel se hizo mayor, se lo regalo a su hijo Pablo. Diciéndole:
-Guarda
este móvil muy bien y no dejes que nadie te lo quite.
-¿Por
qué papá? ¡Pero si es un móvil muy antiguo! –dijo Pablo
-Porque
tiene un don muy especial. -respondió el padre.
-No
solo sirve para llamadas y mensajes… sino que para ti será como un ángel de la
guarda que te avisará cuando estés en peligro. Aunque se rían de ti por su
aspecto sólo tú sabrás su secreto…
Pedro Rodríguez Martín 1º E.S.O. E